Dicen por ahí: mata un perro y te dirán mata perros. Por lo regular tendemos a señalar al otro al mínimo error y siempre queda en nuestra cabeza que “ese” se equivocó.
¿A qué se debe? Se me ocurre que puede ser nuestro propio ego. Ese gusano loco que se nos mete en la cabeza creyendo que todo tiene que ver contigo o como dicen los [...]